Mostrando entradas con la etiqueta vivir en Ti. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta vivir en Ti. Mostrar todas las entradas

miércoles, 24 de agosto de 2022

QUIERO Y TRATO DE ESFORZARME DE VIVIR EN TU PALABRA, SEÑOR


*ORACION: VIVIR EN TI,  SEÑOR*
Señor, quiero cambiar mi vida.
Ayúdame, Señor, a buscar mi rostro, a descubrirme por dentro con sinceridad, a aceptarme como en realidad soy.
Ayúdame a aguantar mis miedos, mis inseguridades, a superar mis fracasos y salir de mis desilusiones.
Ayúdame a valorar mis capacidades y mis valores, a tener fe en la fuerza que has puesto en mi corazón.
Ayúdame a saber comenzar cada día, apoyado en Ti y en mis hermanos. 
Quiero fuerza interior para cambiar el mundo.

A pesar de mi debilidad y mis contradicciones, quiero empeñarme, comprometerme en el mundo de los que sufren; dejar de decir sólo palabras y mojarme en hechos. 

Quiero vivir el dolor de las personas rotas; sobrevivir con los que sobreviven apenas; saber lo que es vivir con poco o con nada.

Aquí estoy, Señor Jesús, con las manos abiertas a la ayuda. Amén.

Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.

sábado, 6 de agosto de 2022

VIVIR CADA DÍA DE MI VIDA EN TU PRESENCIA

*ORACION: VIVIR EN TI, SEÑOR*

Concédeme, Señor, la gracia de tener un corazón siempre abierto al bien, a cultivar la gratitud, a ser caritativo y amable con los demás, a no dejarme llevar por la soberbia y el individualismo!

 ¡Te pido, Señor, un corazón abierto al bien que no sucumba a la tentación de pronunciar palabras ligeras, abrazos falsos, sonrisas vacías de autenticidad o perdones que no se sienten!

 ¡Ayúdame, Señor, a no construir mi vida a base de críticas, juicios, malas interpretaciones, enfados, enfrentamientos o conflictos con el prójimo!

 ¡No permitas, Señor, que mis actitudes estén precedidas por la ley del que más puede, de la astucia o del ser más pillo que el otro sino que todas mis acciones, palabras y gestos estén impregnados de sencillez, humildad, generosidad y libertad para hacer el bien, para que el ambiente sea agradable y no esperar recompensas a cambio!

 ¡Concédeme, Señor, la gracia de cultivar en mi corazón la nobleza para que todo esté impregnado de gratitud!

 ¡Te invito a que seas el jardinero de mi jardín interior para que podes todo aquello que deba ser podado y no haya más que flores que dan luz, color y olor a mi vida para entregarla a los demás! Amén.

Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.