domingo, 10 de abril de 2022

CAMINO DE LA PASCUA: XIV ESTACIÓN

Sábado  9 de abril_

*XIV Estación: Jesús colocado en el sepulcro.* 

Señor, tú lo habías repetido muchas veces: "El grano de trigo muere para dar a millares,  el fruto que da la vida". Tú Señor, has muerto para vivir. La muerte no es el final del camino sino que es el inicio de una nueva vida  que tú, Señor, inauguras con la resurrección. 

Gracias, Señor, por amar hasta el final, porque nos has amado de verdad y porque el sepulcro no es el fin de la historia sino el triunfo de Jesús resucitado, el triunfo del amor. No busquéis entre los muertos al que vive resucitado. El Señor es la vida, es la alegría de la vida.  

Gracias porque vives para siempre. Amén. 

Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina

SOLO EL AMOR SALVA

No hay otra arma más eficaz y efectiva que el amor. El amor limpia toda huella del mal y no deja rastro. Solo amando podemos solucionar el problema del enfrentamiento, la disputa, la venganza y el odio. Solo el amor solucionaría todos los problemas que plantea este mundo. La solución, pues, es amar, amar y amar. Y esa es la propuesta de Jesús. Se ha dejado clavar en la cruz, entregando su Vida, precisamente, por amor. Y por el amor ha reunido a todos en torno suyo. Después de más de dos mil años, ese amor visible y derramado en la cruz, sostiene al mundo con esperanza de fraternidad y paz.


Tengamos en cuenta que, cada día, rezamos, posiblemente, más de una vez el Padrenuestro. Pensemos, ahora, con paciencia y serenidad, lo que decimos: Padrenuestro que estás en los cielos…Perdónanos nuestras ofensas como nosotros perdonamos a los que nos ofenden… ¿Caemos en la cuenta? ¿Nos damos cuenta de lo que decimos? Si somos capaces de perdonar a quienes nos ofenden, tal y como Dios nos perdona a nosotros, los problemas de nuestro entorno, de nuestro pueblo y de todo el mundo se terminarían. ¿Imaginan ustedes ahora que Rusia y Ucrania se esforzaran en cumplir esta petición? Sin lugar a duda, la solución está en el perdón.


Y, si nosotros tenemos la posibilidad de salvarnos, es por el perdón que nuestro Padre Dios nos ofrece y nos regala. Su Misericordia es Infinita. ¿Nos damos cuenta? La cruz significa eso, amarnos como hermanos en el Señor, porque, detrás de la cruz está la Resurrección y la plena felicidad eterna. ¿No es eso, en definitiva, lo que buscamos? Pues, tengámoslo en cuenta, amar es la solución. Y el amor pasa por el perdón. Amén.